Por un amor eterno

¿Has tratado por todos tus medios de encontrar al amor de tu vida, alguien que te complete, que siempre esté allí contigo, alguien que te escuche, que se preocupe por ti? Yo sé cómo hacerlo, y no es a través de ninguna red social como ustedes pensarán.

Primero lo que debes hacer es ir al bosque más cercano a tu hogar, en una noche sin luna, tan solo armado con un cuchillo, unas velas negras, un papel y una pluma. Debes llegar al claro de ese bosque y poner todo lo que has traído sobre el muñón de un árbol cortado, no te preocupes, eso aparecerá misteriosamente en el bosque donde vayas.

Luego de haber preparado todo, prende las velas a la hora señalada (la medianoche) y mantenerte arrodillado. Bajo ningún momento te muevas de esa posición. Por más que las piernas se te cansen y se te acalambren, por más que empieces a ver y escuchar cosas, por más que sientas miedo, no te muevas de tu posición, porque de lo contrario, ese lugar será lo último que veas vivo.

Luego de unos minutos di en voz alta tu nombre y que vienes a buscar el amor verdadero, incondicional y eterno. Si el bosque y los dioses están de tu lado continúa con el rito, si no, huye lo más rápido de ahí, por el mismo camino por el que viniste y bajo ningún momento te des vuelta.

Como decía, continúa con el rito diciendo también en voz alta, “esta noche firmo mi amor condicional con mi amada, para toda la eternidad” y con el cuchillo córtate la mano izquierda. Moja la pluma con algo de tu sangre y escribe tu nombre sobre el papel, luego quema esta carta en una de las dos velas.

Verás que de entre la oscuridad del bosque saldrá una hermosa mujer, ataviada de blanco, de la cual te enamorarás profundamente al instante. Esta te pedirá que la ayudes, lo cual por el resto de la eternidad, pero cuidado, que si llegas a engañarla con otra o llegas a dejar de quererla… Bueno, no es lindo pelearse con un demonio, ¿verdad?

— Via Creepypastas